Cada año, somos muchos los que, al incorporarnos al trabajo en septiembre, comprobamos que nos hemos puesto unos kilos de más. Durante el verano nos hemos permitido caprichos culinarios de todo tipo: comer fuera de casa, probar restaurantes nuevos, disfrutar del aperitivo,…hábitos que no solemos tener en otras épocas del año pero…¿cuál es el resultado? Esos kilos de más.

Soluciones para perder los kilos de más

En primer lugar, es importante saber que, cuanto más tiempo dejemos «almacenados» los kilos de más, más dificultad tendremos después en perderlos. Esto ocurre por la Ley de la fijación de la grasa en el organismo: cuanto más tiempo lleva depositada la grasa ,mayor dificultad encontramos para perderla. Por lo tanto, no dejes para mañana lo que puedas perder hoy.

Si hemos alterado la rutina en vacaciones, recuerda la importancia de realizar 5 ingestas diarias (3 más abundantes y 2 tentempiés) a las horas pautadas. Esto nos va a ayudar a pasar menos hambre y a que nuestro cuerpo se vaya adaptando al nuevo horario.

Salir de casa sin desayunar no contribuye a perder peso. Si se llega con mucha hambre a la hora de la comida, se corre el peligro de picotear durante la mañana y con frecuencia productos poco recomendables. Está científicamente demostrado que: aquellas personas que comen y cenan tarde, tienen más probabilidad de presentar sobrepeso. Por lo que si intentas comer antes de las 15:00 y cenar antes de las 21:00, tendrás mucho ganado. Además, una cena temprana y ligera contribuye a hacer la digestión antes de irnos a dormir y, en consecuencia, disfrutarás de un sueño reparador.

Planificar las comidas principales durante la semana, también nos ayuda a visualizar mejor lo que debemos comer. De esta manera evitaremos imprevistos o recurrir a alimentos poco saludables, con alto contenido en grasa y azúcares.
Podemos preparar un cuadrante semanal, que esté a la vista en la cocina, en el que apuntemos la dieta semanal.

También es importante recuperar los hábitos de hidratación. Recomendamos beber, al menos, 2 litros de líquido diario. Podemos utilizar bebidas frías como: té con hielo, agua con sabor a frutas, infusiones con especias o hierbas aromáticas (menta, canela, romero, jengibre, naranja, pepino,…).

Evita las bebidas alcohólicas, sobre todo las destiladas. El alcohol contiene calorías extras que nos hacen aumentar de peso sin darnos cuenta, además de provocar deshidratación. Los refrescos con azúcar tampoco son un buen aliado, ya que aportan muchas calorías. Aunque es preferible optar por las variedades light o zero, recuerda que no conviene abusar de ellas.

En cuanto a los alimentos que debemos tomar, recomendamos las frutas y verduras que contienen un alto contenido en agua y son bajas en calorías. En vacaciones es más complicado cumplir con la recomendación de «tomar 5 piezas de frutas y verduras al día», por lo que la vuelta es un buen momento para reintroducirlas en la alimentación.
Las verduras que podemos disfrutar en esta temporada son: acelgas, berenjenas, boniato, calabaza, cebolla, champiñón, lechuga, pepino, pimiento, puerro y tomate.
En cuanto a las frutas, en este mes podemos encontrar: frambuesa, higo, kiwi, mango, manzana, melón, mora, pera, plátano y uva.

Si en las vacaciones hemos optado por los fritos, las salsas y los platos muy elaborados, este es el momento de dar paso a las ensaladas, fuentes de vitaminas, minerales y fibra. La plancha será también nuestro aliado para preparar carne, pescado y verduras.

Si queremos darnos un capricho dulce podemos optar por batidos o zumos de frutas caseros. Te recomendamos preparar uno de los deliciosos postres o helados NutriCare, bajos en calorías y cargados de nutrientes.

Otro aspecto a destacar es que el tiempo todavía permite realizar ejercicio al aire libre, ya que las temperaturas suelen ser más agradables y tenemos tardes más largas que en invierno. Esto, combinado con el ejercicio que solemos hacer habitualmente, puede animarnos a estar activos durante más horas.

La pérdida de peso debe ser gradual para que podamos mantenerla, una vez que hayamos llegado a nuestro objetivo. Recomendamos alejarse de las «dietas milagro», aquellas que prometen perder mucho peso en poco tiempo, y optar por dietas saludables, con las que conseguirás perder entre 1-2 kg a la semana.

Los Programas NutriCare pueden ayudarte a llegar a tu peso ideal, ya que contienen todos los nutrientes que necesitas,combinando una amplia gama de comidas sustitutivas con alimentación convencional. Además, el seguimiento, apoyo y motivación de un Asesor Nutricional, te ayudará a conseguir tu objetivo con facilidad.